Sra. Kummle, usted es miembro del consejo de administración de la Fundación Stoll VITA desde 2011. ¿Qué significa para usted personalmente el trabajo de la fundación?
El trabajo de la fundación es multifacético y ofrece numerosas oportunidades organizativas. Me resulta muy emocionante organizar las operaciones diarias, los numerosos eventos, como conferencias, conciertos y exposiciones diseñadas especialmente para involucrar a los jóvenes en la educación. Tengo mucho que ver con la gente, por ejemplo, cuando guío a grupos o clases escolares a través de las exposiciones. Por supuesto, eso significa que tengo que prepararme a fondo con antelación.
También me resulta muy gratificante ver cómo el público y numerosas clases escolares utilizan activamente nuestro gran jardín y nuestras instalaciones. Las solicitudes de financiación que recibimos en los ámbitos de la medicina/salud, la educación, el medio ambiente y la nutrición suelen ser muy interesantes; a menudo me sumerjo en temas con los que, de otro modo, nunca habría entrado en contacto.

¿Qué representa hoy en día la Fundación Stoll VITA y qué la distingue quizás de otras fundaciones?
El hecho de que la pareja fundadora ya hubiera aportado todo su patrimonio a la fundación benéfica durante su vida distingue a la Fundación Stoll VITA de la mayoría de las demás fundaciones. La Fundación Stoll VITA, afiliada a la empresa, tiene su sede a pocos kilómetros de Sedus Stoll AG. Una parte significativa de los beneficios generados por Sedus Stoll AG se destina a la fundación en forma de dividendos y, por lo tanto, vuelve a la región.
Los habitantes de Waldshut-Tiengen tienen acceso diario a un gran jardín con juegos infantiles, huertos urbanos, una fuente y gallinas, que es cuidado por un maestro jardinero y educador en hierbas aromáticas a tiempo completo, que cada semana cultiva el huerto con numerosos niños y un grupo de inclusión.
La región también se beneficia de eventos, exposiciones y la puesta a disposición de salas gratuitas, y nos complace poder aprobar siempre proyectos de patrocinio en el distrito de Waldshut, como la plantación de miles de árboles, compras para escuelas y apoyo a comidas saludables para escolares. Pero también apoyamos muchos proyectos a nivel nacional en las áreas definidas en nuestros estatutos.
¿Se sigue sintiendo hoy en día la influencia de los fundadores Christof y Emma Stoll? Si es así, ¿cómo?
Puedo responder a esta pregunta con un «sí» rotundo. Los objetivos de la fundación, que los fundadores establecieron en 1985, siguen vigentes hoy en día. Siempre recuerdo cómo Emma y Christof Stoll se adelantaron a su tiempo en su compromiso con la alimentación saludable y la protección del medio ambiente en la década de 1970. Sus ideas y objetivos siguen teniendo repercusión, y nosotros seguimos intentando hacerlos realidad. Con motivo del centenario del nacimiento de Emma Stoll, se reeditó su importante libro de cocina, que promueve la alimentación saludable.
La fundación renovó y reformó por completo la casa de Emma y Christof Stoll y luego la alquiló a una guardería sin ánimo de lucro. Estamos convencidos de que la pareja habría acogido esta iniciativa con gran alegría. También hemos creado el entorno adecuado para que se gestione una guardería pública en las instalaciones de nuestra fundación.
Para mí, también es importante el hecho de que las instalaciones de la fundación se encuentren en el lugar donde nació Christof Stoll y donde comenzó la historia de la actual Sedus Stoll AG. Puede parecer un poco tonto, pero puedo decir con seguridad: «¡El espíritu de Emma y Christof Stoll sigue presente!».

¿Hay algún proyecto que le resulte especialmente cercano? Y, si es así, ¿por qué?
La «Bundesverband Kinderhospiz e. V.» (Asociación Federal de Hospicios Infantiles) en Lenzkirch y la «Kinderkrebszentrum Hamburg gGmbH» (Centro Oncológico Infantil de Hamburgo) me resultan especialmente cercanas. A mi nieto de dos años le diagnosticaron leucemia poco después de que se aprobara la financiación sustancial para ambas organizaciones. Desde entonces se ha recuperado de la enfermedad, pero cuando se experimenta en primera persona el duro golpe que supone que un niño padezca una enfermedad que pone en peligro su vida, uno se da cuenta una vez más de lo sensato que es apoyar este tipo de proyectos.
Si tuviera que explicar a un joven por qué son necesarias las fundaciones, ¿qué le diría?
Las fundaciones existían en Egipto y Mesopotamia en el tercer milenio antes de Cristo. Incluso entonces, los activos de las fundaciones eran privados y no procedían del presupuesto estatal. La fuerza de las fundaciones hasta el día de hoy es que son independientes y pueden tomar decisiones libremente. Son una expresión del compromiso cívico y la participación democrática. Las fundaciones pueden promover causas benéficas a largo plazo. Pueden resolver problemas sociales de los que el Estado no se considera responsable, o solo en medida limitada, ya que esto supondría una carga excesiva tanto financiera como en términos de personal.

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